Cicloturismo y acampada: tiendas de campaña

Primera noche - Fertilia
Acampada libre en Cerdeña

Para un gran número de cicloturistas y CicloTravelers, quizás para los que se consideran más aventureros, lo importante no es el destino, sino el camino. Por eso suele ser habitual viajar con una tienda de campaña de reducidas dimensiones como parte del equipaje o, en casos más extremos, un trozo de plástico para hacer un vivac donde se necesite. El caso es que cargar con una tienda de campaña, aunque aumenta el peso que debemos transportar, nos da un extra de libertad a la hora de pasar la noche en cualquier sitio y esto, al menos para muchos de nosotros, es un punto muy importante a tener en cuenta, porque es de esos aspectos que hacen completamente diferente un viaje.

No hay duda, cuando no te gusta demasiado establecer de antemano las etapas de tu viaje y prefieres que las circunstancias marquen el siguiente paso, de que es fantástico saber que no dependes de llegar a una ciudad con hotel o pensión para pasar la noche, y que vas a poder disfrutar de un lugar maravilloso que acabas de conocer sin tener que llegar a un alojamiento que aun está a 20 km. Está claro que, de vez en cuando, se agradece, e incluso se hace necesario, contar con ciertas infraestructuras para asearse, darse una buena ducha o simplemente para pegarse un homenaje, y para eso siempre estamos a tiempo, pero, en nuestra opinión, las noches en tienda de campaña tienen un encanto especial, aunque, en muchas ocasiones, cuando es la única opción y las circunstancias no acompañan, es cuestión de cambiar el “chip” y dejarse llevar porque, al final, todo sale bien.

Hacer acampada libre no suele estar permitido en casi ningún sitio, pero si uno es cuco y busca un lugar apartado cuando ya ha anochecido, monta su tienda o su vivac, pasa la noche y al día siguiente antes de que salga el sol lo desmonta, nadie se habrá dado cuenta de que estuvimos allí. Además, en estas circunstancias es cuando más anécdotas surgen, porque se suelen dar escenas graciosas… No será la primera ni la última vez que, al despertar, nos hemos dado cuenta de que estábamos en medio de un huerto, junto a un cementerio o en otros lugares más curisosos aún, pero ahí está parte de la aventura y la gracia de ser un CicloTraveler.

Tipos de tiendas de campaña para hacer cicloturismo

Los aspectos más importantes a tener en cuenta antes de buscar una tienda de campaña para hacer cicloturismo son:

  • El peso
  • La impermeabilidad
  • El tamaño
  • La transpirabilidad
  • La robustez

El peso de la tienda

Como podréis imaginar, el peso es uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta, puesto que habrá que sumarlo al total de nuestro equipaje y serán nuestras piernas las que tendrán que mover, a fin de cuentas, todo lo que llevemos encima. Tiendas de más de 2 kg de peso no serían recomendables, pero también hay que pensar qué tipo de uso le vamos a dar. Puede ser que vayamos con la idea de pernoctar todas las noches en tienda de campaña, pero en muchas otras ocasiones haremos un uso mixto entre alojamientos tradicionales, como los alojamientos Bikefriendly de los que ya hablamos en su momento, campings o acampada libre. En el primero de los casos, vamos a tener que montar y a desmontar la tienda cada día, por lo que  elegir una buena tienda, de calidad media-alta, sería lo más recomendable ya que, al final, la resistencia de la tienda se debería notar. En el segundo de los casos, quizás no es tan necesario contar con una tienda de altas prestaciones, y, bajo nuestro punto de vista, sería más importante bajar el peso y contar con una buena impermeabilización, para no tener que salir en barca justo la noche en que decidimos dormir en tienda.

Lightent-1 de Ferrino
Lightent-1 de FerrinoFerrino lightent-1
(1450 g. / 3000 mm)

La Impermeabilidad

La impermeabilidad es un aspecto a tener siempre muy en cuenta, pero es cierto que, según donde vayamos, deberemos darle mayor o menor prioridad. Lo que no debemos olvidar es que la lluvia nos puede sorprender cuando menos la esperamos, y en cualquier sitio, y pasar una noche en remojo no se lo aconsejo a nadie, porque no es nada agradable y porque después toca secar los sacos y la ropa y puede ser un problema importante.

En este sentido, impermeabilidades óptimas son las que van por encima de los 2500 – 3000 mm para el techo y por encima de 3000 mm para el suelo de la tienda.

Hogan Ultralight Argon de Vaude
Hogan Ultralight Argon de Vaude
(1490 g. / 3000 mm)

El tamaño

Para nosotros el tamaño de la tienda es importante, ya que las tiendas que montadas abultan mucho, en caso de hacer acampada libre, siempre pueden llamar más la atención y, en estos casos, y teniendo en cuenta que la acampada libre está muy limitada, lo mejor es pasar desapercibido.

Bikamper de Topeak
Bikamper de Topeak
(1630 g. / 2500 mm)

La transpirabilidad

Tan importante es la impermeabilidad de la tienda como su capacidad para transpirar, porque de nada sirve que el agua de la lluvia no entre si, al final, vamos a acabar calados debido a la condensación de nuestra propia respiración. Es difícil conseguir un equilibrio en este aspecto, porque si no queremos que entre la humedad, será difícil también hacerla salir, pero cada vez hay más sistemas de entrada de aire que permiten minimizar el efecto de la poca transpiración de los tejidos impermeables del techo: faldones laterales abiertos, mallas finas muy transpirables para la parte interior de la tienda, etc.

EWing de MSR
EWing de MSR
(552 g. / 1500 mm)

La robustez

Como decíamos al principio, contar con una tienda de campaña bien construida, con varillas resistentes pero elásticas, tejidos resistentes a la abrasión, costuras bien selladas, etc, son, entre otros, elementos claves para disfrutar de una noche en tienda de campaña. El problema, como siempre está en el precio, así que hay que buscar el compromiso entre un precio aceptable y unos mínimos de calidad.

Cobra 2 de Colleman
Cobra 2 de Colleman
(2050 g. / 3000 mm)

 

En definitiva, elijáis lo que elijáis, esperamos que estas reflexiones os ayuden en vuestra elección y nunca olvidéis que, al final, lo importante es saber disfrutar de cada instante que te regale el viaje.

¡Feliz acampada, CicloTravelers!